El saber Ser y Estar

“Siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados.” Romanos 3:24-25
El saber ser: ¿Qué es? Es la característica que nos permite conocer el origen de un objeto o persona, que está formado de un material especifico, con un fin definido para determinado tiempo de acción.

Para poder aceptar a otros tienes primero que aceptarte a ti misma, solo aceptándote puedes vivir tranquila. No es la humildad lo que induce a una persona a exclamar: “no me gusto a mí misma” o “no puedo hacer esto o lo otro” Es más bien una raíz destructiva de falta de confianza en uno mismo y en su propio valor personal.
Antes de ser salvas, tomábamos posturas muy humanistas y muchas decían saber quiénes eran…; y con qué fin fuimos formadas; en realidad, lo que hacían era demostrarle a otros lo que no podían ser.
La presión de la sociedad acrecienta o aumenta nuestro sentido de ¿quién soy?, los avances tecnológicos, las nuevas tendencias; modas, ideas…
El saber se vuelve en un esclavo del ego, del yo., Romanos 12:1-2.
Entonces: ¿a quién pertenecemos?
Nos hemos acostumbrado a valorar las cosas por las normas que establece el mundo: ¿Quién se destacó en qué? ¡Cuánto tienes, cuanto vales!
Se nos dificulta entender qué es lo que nos está tratando de decir Dios en cuanto a nuestro verdadero valor, quiénes somos y a quien servimos.
Dios declaró nuestro valor y lo que somos en la cruz del calvario. Si cuestionamos esto, es falta de fe, no de humildad,” Filipenses 2:5-8.

Saber Estar: ¿Qué significa Estar?
“No que seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros mismos, sino que nuestra competencia proviene de Dios.” 2 Corintios 3:5
Nuestra posición actual no se conforma lo cultural o material ___ ¿Tú eres cristiana?___ Entonces eres declarada justa por Dios; debemos ir creciendo y transformándonos más y más a Cristo.
Dios nos brinda la libertad para saber nuestro valor personal que está ligado a su carácter divino.
¿Te gusta ser quién eres? en medio de todo alboroto feminista, ¿sigues siendo lo que eres?, ¿lo que Cristo desea que seas, con un sentido de satisfacción y bienestar?; es probable que el mundo piense que estás esclavizada a una creencia sin sentido.
Ejerce su femineidad creativamente para el bien de otras y para su propio enriquecimiento, segura que sabes quien te liberó y para que te liberó.
El saber estar está ligado a nuestra madurez espiritual; necesitamos alimentarnos espiritualmente, “Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia.” 2Pedro 1:3

“Aunque trates de preocuparte por estar bien vestida, cuando la gente te vea entrar a una habitación, su mirada es atraída no por el vestido, sino por la calidad de tu presencia; algo que está detrás de tu apariencia exterior” “un espíritu gentil y sereno que es producto de la fortaleza de carácter y la actitud digna, que solo se puede adquirir agradando a nuestro Salvador”.
El saber ser y estar está ligado a nuestro deseo de vivir para Cristo.